Esta es la última ruta de los tres itinerarios que queríamos compartir con vosotros para descubrir la Albufera des Grau. Nuestro paseo de hoy es el mejor para poder observar las aves que anidan. Si os gusta caminar, esta ruta la podemos combinar con la que os propusimos hacia el Mirador de cala Llimpa.
Empezaremos delante del Centro de Interpretación del Parque Natural de S’Albufera des Grau o si lo preferimos, en la rotonda del olivo (si es que venimos de hacer la ruta del Mirador de cala Llimpa). Debemos tomar el camino del noroeste que está señalizado y pasar la barrera de acebuche. Al poco rato, nos encontraremos con unos plafones de madera desde donde se contempa la Cala de Sa Font.
La primera parada será en la Punta de ses Ànedes, a la que llegaremos tomando el desvío a mano derecha que nos encontraremos siguiendo la señalización. En este lugar lugar hay tres puntos disponibles para avistamientos, uno de los cuales es una casita de madera para que podamos ocultar nuestra presencia. Las aves que podremos observar, sobretodo en invierno, son las fochas (Fulica atra), de color negro y pico blanco. También es fácil ver a cormoranes grandes (Phalacrocorax carbo), de color negro y que llegan en invierno de los países del norte de Europa. Si hemos llegado en temporada de verano, observaremos aves migratorias que provienen de África y han llegado a S’Albufera para criar.
La siguiente parada será Cala de Santa Madrona y para llegar, podemos deshacer el tramo de la Punta de ses Ànedes hasta encontrar el camino inicial en dirección norte o bien, seguir el camino de la derecha. El interés de llegar hasta Cala de Santa Madrona es poder contemplar la típica vegetación de humedales, especies que viven en ambientes húmedos como el cañizo (Phragmites australis), la correhuela de agua (Calystegia sepium), o especies que prefieren las aguas salobres como algunos juncos (Scirpus maritimus y S. littoralis) o los tarajes (Tamarix africana). La última parada de este itinerario nos permitirá fotografiar los islotes de la Albufera y Es Prat, una zona impermeable que queda inundada en invierno y que en el siglo pasado, sirvió de zona de cultivo para el arroz aunque se acabó abandonando por su baja rentabilidad. A lo lejos nos quedarán Els Plans de Favàritx, una zona agrícola actualmente en funcionamiento.
Como que la ruta es de ida y vuelta, una vez hayamos superado el tramo circular de Es Prats, se debe deshacer el camino y por lo tanto, podemos aprovechar para detenernos en los puntos que más nos hayan gustado.
Dificultad: Baja
Distancia: 2,80 km
Duración: 60 min