Hoy estrenamos nueva sección de nuestro blog para hacer memoria de aquellos acontecimientos que pasaron en 1998, año en el que se fundó nuestra inmobiliaria, Bonnin Sanso. Y la primera efeméride coincide con la inauguración de La Base Antártica Española Juan Carlos I, gestionada por el CSIC, que se abrió el mismo año que nosotros empezábamos a hacer realidad los sueños de los primeros clientes.
Nos tenemos que desplazar más de 12.000 kilómetros desde Menorca en línea recta. La base se encuentra en la Isla de Livingston, en el archipiélago de las Shetland del Sur. Este archipiélago está al sur del continente americano y a 120 quilómetros al norte de la península Antártica. Es decir, que saliendo de Ushuaia hacia la Antártida son las primeras islas que se encuentran. La base más cercana es la de Bulgaria a 2,7 quilómetros.
Esta base científica, que tiene una superficie de 346 metros2 y puede albergar hasta 19 personas, funciona solo durante el verano austral, es decir, de noviembre a marzo aunque se mantienen registros automatizados todo el año. Su objetivo es apoyar las actividades españolas en la Antártida y en particular, la realización de los proyectos de investigación científica que coordina el Subprograma de Investigación en la Antártida del Programa Nacional de Recursos Naturales. A unas 20 millas de navegación de la base se encuentra la otra base española en la Antártida, de Gabriel de Castilla, situada en Isla Decepción. Este segunda fue inaugurada en el 1989 y es gestionada por el Ejército de Tierra.
De momento solo hay científicos viviendo pero quizás en un futuro, tengamos que abrir una oficina de Bonnin Sansó.