Con el cierre del balance del mes de diciembre, desde Bonnin Sanso, empresa líder del sector inmobiliario en Menorca, reafirman la recuperación del sector inmobiliario después de haber intermediado profesionalmente en más de seiscientas operaciones de compra-venta y alquiler, lo que significa que en 2017 el grupo firmó prácticamente tres operaciones diarias teniendo en cuenta el calendario laboral. Una recuperación que también se ha notado en el interés por la adquisición de solares, una demanda que había quedado prácticamente desaparecida en estos últimos años de crisis y que el año pasado, representó cerca del 10% de las operaciones firmadas. “Todos estos indicadores hacen que los niveles de intermediación de 2017 se hayan situado en cifras similares a las que se vivieron entre los años 2003 a 2006, tres años en los que se superaron todas las previsiones del momento” explica Xisco Pons, Gerente de Bonnin Sanso.
Respecto al comportamiento del sector inmobiliario a partir del perfil de los clientes atendidos, más de la mitad de las operaciones intermediadas por el grupo Bonnin Sanso se produjo con compradores nacionales mientras que el resto se repartió de manera muy diversa entre compradores internacionales. A destacar, en este sentido, el volumen de operaciones del mercado británico, siempre fiel y comprometido con Menorca pese a la incertidumbre del Brexit, cuyo importe medio en las compraventas se situó cercano a los 300.000 euros y en segundo lugar, el pujante mercado francés, cuyo importe medio de operaciones realizadas superaron ampliamente los 700.000 euros. “Hace dos años que el cliente francés se ha convertido en uno de los habituales en operaciones de compraventa especialmente de grandes fincas e inmuebles relevantes en general, demostrando un alto poder adquisitivo y una apreciable implicación con la Isla”, detalla Xisco Pons. El resto de clientes se repartió entre otras diversas nacionalidades, algunas ya tradicionales como las de los mercados italiano y alemán que se refuerzan, y otras claramente emergentes como son los países centroeuropeos.
Más operaciones destacadas
Pero si bien el grueso de operaciones intermediadas por Bonnin Sanso se situaron en unas cifras cercanas a los 300.000 euros, en 2017 crecieron aquellas que superaron el millón de euros. “Mientras que en 2016 nos acercamos al 7% del total firmado, el año pasado se superó el 10% de operaciones de más de un millón de euros, cuatro puntos por encima” detalla el gerente de Bonnin Sanso. A nivel de porcentajes, las operaciones intermediadas durante el año pasado de viviendas hasta 100.000 euros se situó por encima del 25%, entre 100.000 y 300.000 euros por encima del 30%, para operaciones entre 300.000 y superiores a los 500.000, alrededor del 15%. En cuanto a tipologías de inmuebles compradas, lo más habitual durante 2017 fue la adquisición de apartamentos y pisos ( aprox. 40%), chalets y casas de campo (en torno al 30%), casas (algo más del15%), solares (aprox. 10%) y el resto entre locales comerciales, parkings y garajes.
Mercado cautivo de alquileres
Una de las notas negativas de 2017 fue la escasez de viviendas en alquiler, un problema que se venía arrastrando del año 2016 con una demanda cinco veces superior a la oferta. Desde Bonnin Sanso se trata de una situación que hacía tiempo no se vivía de manera tan acentuada durante prácticamente todos los meses del año, y que ha provocado que los precios hayan subido entre un 10 y un 15 por ciento. “Estamos entrando en un mercado cautivo donde no resulta nada fácil poder encontrar una vivienda de alquiler, lo que repercute en una subida acentuada de las rentas de alquiler así como en el atractivo para cualquier inversor que desee rentabilizar su ahorro y, hasta seguramente, revalorizarlo” comenta Xisco Pons.
