Ya hemos hablados otras veces en nuestro blog de actividades de turismo activo sobre naturaleza como las rutas de trekking del Camí de Cavalls pero mención especial tiene la posibilidad de recorrer Menorca montado a caballo. De hecho, este animal tiene una especial vinculación con esta isla gracias al protagonismo que cobra durante sus fiestas patronales pero sin duda, la raza menorquina es mundialmente reconocida. Existen diversas empresas a través de las cuáles podremos entrar en contacto con el mundo ecuestre y un ejemplo de este contacto con el caballo es el que ofrecen en la finca de Son Àngel, que lleva diez años trabajando como una de las empresas más experimentadas de la isla.
La finca de Son Àngel está situada en la zona norte de Menorca y tiene cerca de 300 hectáreas de tierra de cultivo, bosques, costa y edificaciones. Se encuentra ubicada en una zona de gran valor paisajístico, ecológico y con numerosos elementos etnológicos. El turismo ecuestre es el turismo de los pequeños detalles y en Son Ángel lo saben porque disponen de diferentes rutas para descubrir su impresionante costa salvaje. De hecho, el norte de Menorca es una de las zonas preferidas por los jinetes en la que las salidas, a menudo se combinan con experiencias culturales y gastronómicas que se diseñan a medida.
Para visitar la zona sur, una buena opción es la que propone el hotel Rural de Binigaus Vell, que dispone de una yeguada propia de raza menorquina, española y cruzados. Una de sus interesantes propuestas es la que recorre el Camí de Cavalls de Levante a Poniente. Empieza suavemente en Es Canutells, para acabar recorriendo el paisaje accidentado que conforman los barrancos sureños de la zona centro. Durante la ruta se visita entre otros Cales Coves, una antigua necrópolis de la Edad de Hierro que cuenta con más de 90 cuevas o la playa más larga de Menorca, la playa de Son Bou a cuyo pié se encuentra una Basílica Paleo-Cristiana, datada del 400 D.c.