Reforzar el atractivo de Menorca en su vertiente cultural es el objetivo que se persigue con la declaración de la Cultura Talayótica como Patrimonio Mundial de la Humanidad por parte de la UNESCO, una iniciativa que impulsan las instituciones locales y a la que ha dado apoyo el Consejo de Patrimonio Histórico reunido en Menorca en marzo de 2015.
La Isla, con una superficie de 700 kilómetros cuadrados, cuenta con 1.574 yacimientos arqueológicos, de los cuales 1.401 están catalogados como Bien de Interés Cultural. Los monumentos vinculados a la Cultura Talayótica tienen un valor excepcional por su técnica constructiva, su grandiosidad y su buen estado de conservación, pese a tener la mayoría de ellos una antigüedad superior a los 4.000 años.
De entre ellos, se han seleccionado los 25 que mejor sintetizan la prehistoria menorquina, por su cronología, tipología, funcionalidad y la significación que tienen en el ámbito insular. Entre los monumentos seleccionados encontramos la Naveta des Tudons, Torretrencada, Torrellafuda, Cala Morell, Torre d’en Galmés, Talatí de Dalt, Trebalúger o Trepucó.
Visitar estos enclaves o cualquiera de los otros yacimientos incluidos en la lista indicativa de bienes que aspiran a ser reconocidos como Patrimonio Mundial de la Humanidad es una oportunidad para conocer la riqueza histórica y patrimonial de la Isla, para acercarse a una Menorca encantada y diferente.